Rectores de universidades nacionales reclamaron al Congreso que respalde la ley de financiamiento. En paralelo, facultades de la UBA aplicarán recortes para sostener su actividad pese a la situación crítica.
Universidades llaman a marchar contra el veto de Milei
Las autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) manifestaron su rechazo al veto de Javier Milei a la ley que actualiza el financiamiento universitario. Al mismo tiempo, reclamaron al Congreso que vote en contra de la medida presidencial y convocaron a una nueva movilización para el día en que se discuta en el recinto.
En paralelo, se confirmaron recortes en el funcionamiento de distintas facultades de la UBA, que permitirán sostener la actividad pese al “estado crítico” generado por la falta de recursos nacionales.
La postura de las universidades se conoció poco después de que los gremios docentes y no docentes de la UBA anunciaran medidas de fuerza para mañana: la Federación de Universidades Nacionales (Fedun) declaró un paro general en todas las casas de estudio, y varios sindicatos confirmaron que se sumarán a la movilización junto a trabajadores del Hospital Garrahan.
“La caída salarial es atroz”, advirtió el rector de la UBA, Ricardo Gelpi, quien señaló que muchos docentes renuncian a sus horas, se suspenden proyectos de investigación y, de seguir este camino, “no habrá futuro para la universidad ni para el país”.
Sus palabras fueron acompañadas por el presidente y el vice del CIN, Oscar Alpa y Franco Bertolacci, que participaron de la conferencia de prensa en la que también se lanzó la convocatoria a marchar cuando el Congreso debata el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario.
Gelpi apeló al acompañamiento social: “Necesitamos la sensibilidad de nuestro pueblo para que siga respaldando nuestro reclamo”. Además, hizo un llamado directo a los legisladores nacionales para que, “con su voto, rechacen el veto presidencial y respalden la ley, así como la composición salarial de docentes y no docentes”.
Aunque aún no hubo un pronunciamiento conjunto, se espera que las universidades públicas de todo el país unifiquen su posición en una declaración del CIN. Por ahora, las manifestaciones han sido aisladas.
El rector también pidió al Poder Legislativo que apruebe un presupuesto con criterios de previsibilidad, que evite la discrecionalidad en 2026. Recordó que las universidades enfrentan este escenario por segundo año consecutivo con un presupuesto prorrogado. En ese marco, instó a los diputados a poner especial atención al proyecto que el Presidente presentará por cadena nacional antes de enviarlo al Congreso.
Mientras tanto, la UBA advirtió que se verá obligada a implementar un “plan de restricción” en sus gastos operativos. Según explicó Gelpi, se reordenarán actividades en horarios diurnos y se postergará el encendido de luces para reducir el consumo eléctrico. “Son ajustes normales para bajar los gastos y que nos permiten seguir funcionando”, aseguró.
De todos modos, advirtió: “Estamos entrando en una situación crítica y, si el Congreso no revierte el veto y confirma la ley de financiamiento, la UBA funcionará en un estado crítico para poder terminar el año”.

