De acuerdo con los entrevistados, el partido libertario exhibe un “discurso deteriorado e incoherente” luego del episodio con el economista. Además, señalan que el presidente “ha visto afectada su autoridad moral” y “ya no resulta convincente” al hablar de “la casta”, el pilar fundamental de su estrategia discursiva.
Las redes reflejan una fuerte caída en la imagen de Milei, en un contexto donde la desaprobación hacia Espert, Reichardt y Santilli supera el 88%.
De acuerdo con un informe recientemente publicado, el escándalo protagonizado por el diputado José Luis Espert generó un impacto significativamente negativo en la percepción pública del Gobierno, del presidente y de sus principales candidatos en la provincia de Buenos Aires: Diego Santilli y Karen Reichardt.
El estudio, elaborado por Monitor Digital durante el último mes, indica que el caso Espert influyó de manera considerable en el debate político en medios digitales y redes sociales, contribuyendo al debilitamiento de la imagen de Javier Milei y del discurso de La Libertad Avanza.
De acuerdo con el informe, durante las últimas semanas las conversaciones relacionadas con el economista libertario implicado en una causa por presuntos vínculos con el supuesto narcotraficante Fred Machado presentaron un “90% de sentimiento negativo”. Los análisis semánticos reflejaron la predominancia de términos como “lavado”, “dólares”, “Fred Machado”, “vínculo” y “narco”. Además, el reporte destaca que el 4 de octubre se alcanzó un nivel inusualmente alto de actividad, con más de 130.000 menciones al caso.
El estudio advierte que las figuras designadas para reemplazar a Espert —Karen Reichardt y Diego Santilli— no lograron redirigir el eje del debate público. En redes sociales, sus nombres continúan asociados al escándalo, con niveles de desaprobación que oscilan entre el 88% y el 94%.
Las conversaciones en torno a Reichardt, exmodelo de Playboy, se articulan principalmente en torno a los términos “renuncia”, “fiscalía” y “encabezamiento”, en referencia a su ubicación en el primer puesto de la lista legislativa tras la dimisión de Espert. En el caso de Santilli, predominan conceptos como “boleta”, “offshore”, “corrupción” y “narco”.
De acuerdo con los datos de Monitor Digital, los tres dirigentes de La Libertad Avanza se encuentran vinculados en un mismo marco temático en las discusiones digitales, centrado en palabras como “lista”, “candidato”, “La Libertad Avanza” y “Milei”. En conclusión, el caso Espert afectó directamente la percepción de sus compañeros de lista, debilitando su posicionamiento público.
Además, los valores que Javier Milei utilizó como base para fortalecer su espacio político —la lucha contra “la casta” y la defensa de la moral frente a la corrupción— perdieron fuerza tras el escándalo que involucró al economista. Según el informe, esta percepción se reflejó en las redes sociales, donde se viralizaron tres hashtags que resumen el descontento social: #LLACorrupta, #MileiEstafador y #EspertNarco.
El informe revela que los tres principales referentes de La Libertad Avanza presentan índices de percepción negativa particularmente elevados en redes sociales: Karen Reichardt (94%), José Luis Espert (90%) y Diego Santilli (88%).
Asimismo, el electorado digital expresa dificultades para distinguir entre Espert y Santilli, interpretando el reemplazo como una estrategia política oportunista para retener votos. En cuanto a Reichardt, la mayoría de las menciones críticas se vinculan con su pasado en el ámbito del modelaje y la actuación, lo que contribuye a una evaluación pública adversa.
El análisis de Monitor Digital revela que La Libertad Avanza, el partido liderado por Javier Milei, fue el actor político más afectado por el denominado “caso Espert”. En términos de sentimiento neto (NSR), el espacio presenta un valor de -85 puntos, acompañado de una alta frecuencia de menciones que hacen referencia a “falta de ética” y “encubrimiento”. Esta tendencia sugiere una percepción pública de incoherencia e hipocresía en el discurso libertario.
A pesar de mantener una base de apoyo digital estable, Milei experimentó una pérdida significativa de autoridad moral, con un promedio de -60 puntos de sentimiento neto. Por su parte, la imagen del Gobierno nacional alcanza los -70 puntos, lo que refleja un deterioro generalizado en la valoración ciudadana dentro del entorno digital.
El reporte indica que la discusión en redes sociales ha dejado de enfocarse en la gestión del Ejecutivo y en las fluctuaciones económicas, concentrándose ahora en la crisis ética del oficialismo. En términos generales, el caso Espert afectó profundamente la identidad política del Gobierno y socavó el discurso de lucha contra la “casta” y la corrupción que constituyó un pilar central en la campaña presidencial de Milei.

