Se anuncia la creación de la nueva Agencia Nacional de Migraciones.
Bullrich y su eventual sucesora replican estrategias de seguridad inspiradas en el modelo estadounidense.
Inspirada en el enfoque de la funcionaria estadounidense Kristi Noem, conocida por su política de persecución migratoria, Patricia Bullrich —junto a su futura sucesora Alejandra Monteoliva— presentará una nueva ‘Agencia Nacional de Migraciones’. La medida implica reestructurar el área responsable de la política fronteriza y del control migratorio, ahora bajo el Ministerio de Seguridad, con el objetivo de endurecer los controles sobre el ingreso al país.
La dependencia, antes perteneciente al Ministerio del Interior, fue transferida tras la reforma de la Ley de Ministerios firmada por Javier Milei. Aunque inicialmente el RENAPER también había sido incluido en ese traspaso, luego se revirtió y volvió a quedar bajo la órbita de Diego Santilli.
Según trascendidos, Bullrich presentará junto a Monteoliva la creación de una ‘policía migratoria’, una fuerza especializada que asumirá tareas antes realizadas por Gendarmería en fronteras y por la PSA en aeropuertos. Estará integrada por personal de distintas fuerzas federales que recibirá capacitación específica para reforzar el control fronterizo y, según el oficialismo, prevenir delitos como el contrabando y el ingreso de personas consideradas de riesgo.
El decreto 366/2025, que ya había modificado la Ley de Migraciones, incorporó la figura de una ‘Policía Migratoria Auxiliar’ conformada por Prefectura, Gendarmería, PSA y Policía Federal, obligadas a colaborar con Migraciones. En la convocatoria oficial, se anunció que Bullrich y Monteoliva explicarán las funciones, capacidades operativas y proceso de integración de la nueva agencia al Ministerio de Seguridad.
La iniciativa se suma al reciente anuncio del Departamento Federal de Investigaciones (DFI), inspirado en el FBI, y ahora busca replicar el modelo de la US Border Patrol. En julio, Bullrich recibió a Kristi Noem —funcionaria de la administración Trump y conocida por su retórica de mano dura contra la migración—, quien destacó el alineamiento argentino con la agenda de seguridad estadounidense. Meses después, Bullrich firmó un acuerdo con la SIDE y el FBI para reforzar la cooperación en materia de seguridad.
















