La fiscalía acusa a Spagnuolo de haber organizado un esquema para direccionar compras millonarias en la ANDIS. Su defensa, en cambio, sostiene que los audios centrales de la causa fueron alterados mediante inteligencia artificial y cuestiona que la Justicia no haya realizado una pericia técnica sobre ellos.
Sobre la vivienda de Pilar, uno de los ejes de la acusación, D’Alessandro negó que hubiera habido una remodelación millonaria y afirmó que se trató solo de un arreglo menor. La fiscalía, en cambio, investiga si parte del dinero proveniente de coimas financió una refacción sustancial realizada entre septiembre de 2024 y febrero de 2025 en la casa del barrio Altos de Campo Grande, adquirida en 2021 y situada en un lote de 860 m². El ingreso de personal de obra al barrio durante ese período respalda esa línea de investigación.
Los investigadores también detectaron gastos muy superiores a los ingresos declarados por Spagnuolo: entre enero y abril de este año sus consumos con tarjeta no bajaron de $4 millones, y entre agosto de 2023 y junio de 2025 promediaron más de $2 millones mensuales, pese a percibir un salario de alrededor de $3 millones. Además, las refacciones en Pilar no figuran reflejadas en sus declaraciones juradas ante la Oficina Anticorrupción.
El abogado también cuestionó otros elementos del expediente. Sostuvo que la imputación por un pago de $5 millones presenta inconsistencias temporales, ya que estaría fechado el 11 de junio mientras que las fotos que lo respaldan fueron tomadas el 13 de agosto. Sobre la mochila que aparece en esas imágenes, afirmó que contenía la computadora de su cliente y no dinero. También relativizó el video que muestra a Spagnuolo entrando a la casa de Miguel Ángel Calvete —detenido esta semana— al señalar que alguien lo habría citado allí para generar esa captura y aprovechar la imagen del ingreso con la mochila.”

D’Alessandro adelantó que pedirá una ampliación de indagatoria cuando arriben la pericia completa desde Alemania y los informes sobre eventuales intervenciones telefónicas. También señaló que Spagnuolo mantenía una relación personal previa con Miguel Ángel Calvete, anterior a su ingreso al organismo.
Aunque negó cualquier participación de su defendido en maniobras ilícitas, reconoció —según su propio planteo— que existía un sistema de recaudación, pero sostuvo que Spagnuolo no integraba ese circuito. Afirmó que su cliente ‘no teme quedar detenido’ y que es ‘víctima de un delito’.
La investigación por corrupción en la ANDIS se volvió un frente crítico para el Gobierno, tanto por la magnitud de los involucrados como por el impacto institucional del caso. El expediente abarca a funcionarios, intermediarios y contratistas vinculados a la compra de medicamentos de alto costo destinados a personas con discapacidad que dependen de pensiones no contributivas.


















