Los gremios universitarios convocaron a un paro de 72 horas a partir del miércoles en reclamo por la falta de aplicación de la Ley de Financiamiento Universitario.

Paro de 72 horas en las universidades nacionales por la falta de aplicación de la Ley de Financiamiento

A partir del miércoles, las universidades nacionales iniciarán un paro de 72 horas en reclamo por la falta de implementación de la Ley de Financiamiento Universitario. La norma, que fue aprobada por el Congreso en dos oportunidades y promulgada por el Gobierno el pasado 21 de octubre, aún no cuenta con el presupuesto necesario para su ejecución.

“La profundización de las protestas es necesaria frente a la reforma laboral y el plan de esta gestión, que atenta contra la universidad pública, los hospitales públicos y los derechos laborales”, sostuvo Pilar Barbas, secretaria de la Federación Universitaria Argentina (FUA).

Por su parte, los gremios docentes denunciaron que los salarios “no fueron recompuestos” y advirtieron que, pese a las tres marchas federales en defensa de la educación pública, el presidente Javier Milei “se niega a cumplir con la ley”.

La Ley de Financiamiento busca garantizar aumentos salariales y frenar el vaciamiento de la educación pública

La Ley de Financiamiento Universitario, aprobada por el Congreso y promulgada en octubre, establece un aumento salarial para los trabajadores del sector y apunta a evitar el progresivo vaciamiento de la educación pública.

“La ley debe aplicarse sin más demora, no solo porque es ley, sino porque es anticonstitucional no hacerlo. Cada día que pasa se profundiza el vaciamiento de la universidad pública. Según lo estipulado, nos deben un 44% de aumento. Ya no es un reclamo, es una deuda”, afirmó la secretaria general de la Asociación Gremial Docente de la Universidad de Buenos Aires (AGD–UBA), Ileana Celoto.

La dirigente advirtió además que los bajos salarios están generando una crisis entre el personal universitario, que “no puede sostener más las tareas con los sueldos actuales”. “En muchos casos los ingresos están por debajo de la línea de pobreza”, señaló.

Celoto explicó que esta situación ha derivado en “pedidos de cambio de dedicación”, es decir, en reducciones de carga horaria, y alertó sobre las consecuencias a largo plazo: “Se están vaciando los equipos de trabajo”.

“Estamos defendiendo la universidad pública para que no quede como una cáscara vacía, con equipos que ya no pueden cumplir las funciones para las que fueron designados”, concluyó.